sábado, 9 de julio de 2011

Ntra. Sra. del Carmen Coronada de Cádiz


La bendita imagen de Ntra. Sra. del Carmen de Cádiz es la titular mariana de la Ilustrísima y Venerable Archicofradía Sacramental de Ntra. Madre y Señora del Carmen Coronada, Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz. Recibe culto en la Iglesia Parroquial del Carmen y Santa Teresa, en la Alameda Gaditana.




La imagen de Nuestra Madre y Señora del Carmen Coronada, de bellísima hechura, es de candelero, de las de vestir. Lleva al dorso grabado el nombre de su autor, el imaginero Jacinto Pimentel, y la fecha de la ejecución, 1638. Ostenta labradas cabeza y manos.
Es una devota figura de la Madre y Reina del Carmelo, que es objeto de los fervores de su cofradía y que ha recibido culto permanente desde sus inicios hasta nuestros días, primero en Santo Domingo y luego en el templo que se erigió en su nombre y honor, en la Alameda de la ciudad de Cádiz.
El contrato para realizar la imagen se concertó y verificó en escritura pública, según consta en acta notarial existente en el Archivo Histórico Provincial de Cádiz:
"El 26 de mayo de 1638, Simón de Tolosa, maestro barbero, vecino de Cádiz y mayordomo de la cofradía de Ntra. Sra. del Carmen sita en el convento de Santo Domingo de dicha ciudad, concertó con Jacinto Pimentel, maestro escultor, vecino también de Cádiz, que a partir del día de la fecha y en todo el mes de agosto de este mismo año de 1638, haría y acabaría "con toda perfección una imagen de Nuestra Señora del Carmen, de madera y encarnada para vestirla de ropas naturales, del tamaño de la imagen de Nuestra Señora del Rosario que está en el convento de Santo Domingo, y para en cuenta de lo que ha de haber por la dicha hechura declaró (Pimentel) haber recibido del dicho mayordomo, por cuenta de la dicha Cofradía, adelantados, doscientos reales de los cuales se dio por contento y entregado a su voluntad".
"Y habiéndola acabado en toda perfección, el dicho mayordomo ha de ser obligado a pagar lo que se concertare y, no concertándose, cada uno por su parte ha de nombrar un maestro del dicho oficio de escultor que vieren la dicha imagen y lo que a nosotros dijeren y tasaren que vale la dicha hechura de ella se ha de dar y guardar sin que sea necesario una prueba ni diligencia alguna más de su declaración y sin pedir juramento en que queda diferido se le ha de poder ejecutar al dicho mayordomo ,pagado todo ello en moneda de vellón en esta ciudad ...".
AHP-Cádiz-Signatura 4198,folio 371. (Diario de Cádiz 22-XI-95)


La imagen del Niño Jesús, que Nuestra Señora del Carmen lleva en sus brazos, es posterior a la propia imagen de la Virgen. La autoría del Niño Jesús se desconoce, aunque se atribuye a la gubia del imaginero genovés Domenico Giscardi, del siglo XVIII.
En el estado de cuentas en el que se pormenorizan los gastos ocasionados con el traslado desde Santo Domingo al Carmen y que conserva la Hermandad, se detalla que se mandó hacer una imagen del Niño Jesús para la Virgen, y que se pagó por ella la cantidad de 300 reales de vellón. Estas cuentas son de 1761.
Ntra. Sra. realiza la Solemne procesión por las calles de Cádiz el 16 de Julio en un armonioso paso de palio. Los bordados del mismo, aunque en un principio, estaban confeccionadas en tejido de malla de oro, y fueron bordadas por las Madres Trinitarias, de Sevilla, en el año de 1928. Al igual que el manto, fueron donadas a la Archicofradía por Doña María Martínez de Pinillos. En 1996, Juan Zamanillo Tornay  y  Lorenzo Guttemberg Macías restauraron estas bambalinas, pasando los bordados originales a tela de tisú de plata, siguiendo el diseño de Juan Carlos Romero Pérez, el cual alteró la composición original para adaptarlo al diseño del manto procesional. Las bambalinas están decoradas con hojas, flores, destacando las rosas y palmas, así como las jarras cónicas que tan peculiar la hacen. Los bordados interiores siguen el mismo diseño, a excepción de la delantera y la trasera, que sustituyen los escudos carmelitanos por pinturas que representan la visión de la "nubecilla" por el profeta Elías, y la entrega de la Bula Sabatina al Papa Juan XXII. Ambas pinturas han sido realizadas por el imaginero gaditano Luis E. González Rey.
El techo de palio es obra de las Madres Trinitarias de Sevilla de 1928, en el que la gloria central se representa a la Santísima Madre del Carmelo entregando el escapulario a San Simon Stock.
Los respiraderos del paso son obra del orfebre Juan Landa en 1964, están labrados en alpaca repujada, al igual que los varales.
En la actualidad el orfebre sevillano Jesús Domínguez está labrando en plata una nueva candelería de la que ya han sido estrenadas algunas tandas.
El manto de salida es una excepcional pieza, cuyo diseño está atribuido al genial bordador sevillano Juan Manuel Rodríguez Ojeda. Fue realizado por la Madres Trinitarias de Sevilla en 1927. Este excepcional manto fue donado a la Virgen del Carmen por doña María Martínez de Pinillos, camarista de la Señora desde 1926 a 1964. Está decorado con piezas bordadas en oro que simulan hojas de acanto, palmas, cardos y flores, así como jarras y lazos, y aparece presidido por el escudo carmelitano sobre cartela, con un querubín bordado en la parte superior, y rematado por corona real. En 1991 fue restaurado y pasado por los bordadores gaditanos Juan Zamanillo Tornay, Lorenzo Guttemberg Macías, Juan Carlos Romero Pérez y Juan Manuel Fernández Otero.



























Entre las distinciones que posee la venerada imagen están la Medalla de Oro de la Ciudad de Cádiz y la Coronación Canónica, que tuvo lugar en un solemne acto en la Catedral de Cádiz de 22 de Julio de 2007.


Bella y antigua instántanea de la Solemne Procesión de Ntra. Sra. del Carmen de Cádiz

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